Negligencia, falta de capacidad e insuficientes inversiones, marcan una dura realidad; la falta de agua y luz esta matando al sector inmobiliario.
Por Horacio Urbano*
Digámoslo como es… Así, durito… Sin anestesia… La producción de vivienda llegó a mínimos históricos, excepto en el caso de la del segmento social… Esa de plano, se murió.
¿Quién tiene la culpa de esta barbaridad, porque el hecho es que sigue habiendo un enorme rezago que se agudiza en los grupos más vulnerables?
Pues podría decirse que no hay un culpable único, sino un sistema de factores, que al conjugarse, implican un impacto sistémico, que se traduce en un daño igualmente sistémico.
Pero no nos hagamos güeyes, puede ser que la culpa sea de este sistema, pero es el gobierno, en la coordinación (o falta de la misma) en sus tres niveles, el responsable de haber dejado que dicho sistema nazca, se fortalezca y tenga a la vivienda contra las cuerdas.
Y además podría decirse que, como sucede en el fútbol, la cancha también cuenta. Porque tampoco hay que olvidar que venimos saliendo de una pandemia, de una desaceleración de la economía mundial y de un proceso inflacionario también de alcance global.
Y bueno, si ese es el contexto internacional para entender lo que ha pasado en nuestra economía y en el sector vivienda, también hay que considerar los inmensos problemas que se generan aquí en casita.
Porque el hecho es que la producción de vivienda se enfrenta a evidentes cambios de política pública, a la obsolescencia normativa y a la negligencia y/o falta de capacidad de muchos de los funcionarios que, desde los tres niveles de gobierno, tienen que ver con los procesos urbanos y con la producción de vivienda.
Y hoy, la posibilidad de hacer frente al reto habitacional enfrenta los retos provocados por la obsolescencia en la planeación urbana y las diferentes normativas relacionados con la producción, los excesos regulatorios y la corrupción, relacionadas con su producción.
El suelo se ha vuelto escaso y caro, más si además de los vistos buenos urbanos se espera que cuente con dotación de luz y agua.
Porque se habla mucho del alto costo del suelo, pero poco se dice que la falta de agua y luz está ahogando a las ciudades.
Es increíble, pero la negligencia, falta de capacidad e insuficientes inversiones, marcan una dura realidad; la falta de agua y luz esta matando al sector inmobiliario.
Algo hay que hacer, porque no es que no haya agua, es que es absurdo que el mínimo trámite duerma durante meses en el escritorio de quien debiera atenderlo.
Tan absurdo, como el hecho de que falten inversiones públicas para garantizar el abasto de energía eléctrica, al mismo tiempo que se cambió la regulación para prohibir que un privado pueda generar esa energía que tanta falta hace.
Ecos del V Informe
El presidente Andrés Manuel López Obrador rindió su V Informe de gobierno.
Un V Informe que sin ser el último, sí que huele al ultimo, porque el próximo, con base en una nueva legislación electoral, se llevará a cabo cuando quede apenas un mes para que tome posesión el próximo Presidente o Presidenta de México.
Y que se siente como el último, porque esta vez los tiempos políticos se han adelantado al extremo, gracias en gran medida al ritmo impuesto por el mismo Presidente.
Y ese adelanto nos dice que Xóchitl Gálvez será la candidata a la presidencia por el frente opositor, y que esta misma semana sabremos quién será el candidato, o la candidata de Morena.
Vayamos pues al cierre del sexenio, y a navegarlo en medio de una tempestad política.
Ni modo… Así nos tocó vivir.
Pero volviendo al Informe, veamos que se dijo en materia de vivienda (que la verdad fue muy poco; apenas poco más de dos paginitas).
Dijo el Presidente que en lo que va de sexenio se ha invertido 1 billón de pesos en formalizar 3 millones de “acciones de vivienda” a nivel nacional, lo que hizo posible reducir el rezago del 27.5% que encontró en el 2018 al inicio de su gestión, a 24.3% al cierre del 2022.
Hay que decir que esto ha sido tomando como prioridad programas de autoproducción, que se traducen en muchísimos apoyos por montos pequeños, al mismo tiempo que, como decía en la primera parte de esta columna, la producción formal de nuevas viviendas ha caído a mínimos históricos y la que corresponde al segmento social, sencillamente ha desaparecido.
Hay avances, claro, más si se ve desde la óptica del Presidente, que dijo incluso que hay un avance de 97% respecto al Programa Nacional de Vivienda 2021-2024…
Habrá que ver qué dicen quienes desde la sociedad y la iniciativa privada integran el sector vivienda, del optimismo y los números del Presidente.
Pero hay que decir que también hay muchos temas pendientes.
Aquí dejo solo algunos de ellos:
- Es evidente la urgencia de reactivar la producción de vivienda social… MUY EVIDENTE.
- Hay que crear esquemas de crédito para más de la mitad de la población económicamente activa, que no es derechohabiente de Infonavit o Fovissste, y que difícilmente tendría acceso a un crédito hipotecario de la banca.
- Hay que trabajar mucho en esquemas de ahorro dirigido que facilite el acceso a créditos para vivienda.
- Hay que desarrollar programas de vivienda en renta, incluyendo viviendas de propiedad pública destinadas a renta para grupos de bajos ingresos.
- Urge acelerar la implementación de tecnologías verdes en los procesos de financiamiento, producción y mejoramiento de vivienda.
- Urge reconocer los nuevos modelos de ocupación que la sociedad requiere, para generar respuestas encaminadas a su atención.
- Urge también un poderoso programa de regularización y titulación de vivienda, ya que buena parte del parque habitacional no genera pleno patrimonio por la falta de seguridad en su tenencia.
- Y claro, hacen falta montones de servicios e infraestructuras urbanas.
- Ya decía que había que garantizar el abasto de luz y agua, pero hay también que generar mucho espacio público de calidad y realizar inversiones verdaderamente significativas en transporte público de nueva generación.
Claro que hay avances, pos nomás faltaba. Pero dejándolos de lado, lo verdaderamente relevante es tener muy claros los temas pendientes, para ver qué se logra hacer en lo que queda de sexenio, o ya de plano, para procurar que el próximo presidente, o la próxima presidenta, tenga estos pendientes en su charola de prioridades.
Porque el reto habitacional, igual que la cosecha de mujeres; NUNCA SE ACABA.
Un septiembre muy inmobiliario
Llegó septiembre y con ello tres grandes foros inmobiliarios.
AMPI Realty Summit; un foro regional de gran nivel y, por los temas que toca y la calidad de sus contenidos, con alcance nacional. Organiza AMPI Tijuana, se lleva a cabo esta semana, el ya muy próximo miércoles 6 de septiembre. Obvio, la sede será Tijuana. Informes: https://ampi-realtysummit.com/
Cumbre Inmobiliaria 2023; llega uno de los eventos más relevantes del sector inmobiliario nacional, organizado por Canadevi Nuevo León y que se llevará a cabo los días 19 y 20 de septiembre, en la Sultana del Norte. Informes: https://cumbreinmobiliarianl.com/
IX Simposio de Financiamiento a la Vivienda, ya un verdadero verdadero referente del sector, que se realizará en la Ciudad de México los próximos 21 y 22 de septiembre, bajo la organización de la poderosa Asociación de Bancos de México. Informes: dvigueras@abm.org.mx, sfv@abm.org.mx
Tres muy buenos eventos. Y no es por presumir, pero en los tres tendré el placer de participar dando conferencias y moderando charlas.
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Natalia Hernández
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