La gran mayoría de empresas mexicanas no está preparada para implementar el home office; aun cuando esta modalidad está aprobada por la Ley Federal del Trabajo
De acuerdo con datos de la compañía de soluciones tecnológicas Citrix, en Latinoamérica, únicamente el 40% de las empresas tiene opciones de trabajo flexible; otro 19% permite realizar trabajo vía home office; mientras que el otro 14% tiene la posibilidad de trabajar desde donde se desee.
Además, Citrix reveló que el 48% de los trabajadores mexicanos se cambiaría de empleo si le ofrecieran la opción de realizar home office. Para finales de 2020 se espera que los millennials conformen el 35% de la fuerza laboral del mundo y para 2024 el doble; lo cual significaría para México que, de una representación de alrededor de 39 millones de personas, el 75% preferiría trabajar desde casa.
No obstante, si se considera la situación actual por el Covid-19, únicamente 2 de cada 10 empresas en el país estaban preparadas para aplicar dicha modalidad de empleo; aun cuando el home office está aprobado como una prestación en el artículo 311 de la Ley Federal del Trabajo.
Esto implica que las empresas deben trabajar rápidamente para implementar este tipo de trabajo dentro de sus operaciones diarias; pues, de no adaptarse, podrían poner indirectamente un freno a la retención de los talentos más jóvenes.
Citrix, con base en diversas investigaciones realizadas, señaló que la razón principal por la que las empresas aún no implementan el home office y otras flexibilidades es el miedo a la reducción de productividad de los trabajadores, al no tener un orden establecido ni las herramientas necesarias para trabajar a distancia.
A las empresas les preocupa que la gente no sepa coordinar la carga de trabajo desde otro lugar, sin que los puedan ver; así como que no puedan resolver un imprevisto fuera de la oficina.
Contrario a lo que se piensa, diversos estudios han revelado que el home office puede incrementar hasta en un 30% la productividad de un trabajador; según cálculos de Microsoft.
Para poder implementar esta modalidad de trabajo es necesaria la correcta adecuación de los espacios; y una actualizada operación diaria en términos tecnológicos (Facilities Management); lo cual va de la mano con la transformación de la cultura empresarial y un mayor entendimiento de la época actual.
Otra de las preocupaciones de las empresas es el miedo a que la información de la empresa sea vulnerada; pues hace falta generar protocolos para garantizar la seguridad del negocio; desde aspectos tan básicos como habilitar redes seguras y resguardar la información confidencial, hasta generar hábitos de protección cibernética en los trabajadores.
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Fernanda Hernández
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