Por Julio Alberto Ramos Galindo*
Las empresas tienen como objetivo satisfacer necesidades a través de la generación o creación de productos o servicios. Este objetivo les requiere una estructura organizacional con múltiples recursos. Uno de los recursos más valiosos en una empresa es su activo fijo. En mayor o menor medida dependiendo el sector y necesidad que cubre la empresa, los activos fijos juegan un papel importante y su correcta gestión, es fundamental para la empresa.
La valoración de los activos es importante para la empresa que busca reflejar oportunamente el valor de sus activos en su contabilidad, para cumplimiento de distintas normatividades financieras y contables; financiamiento; registro e identificación oportuna del deterioro de sus activos, en caso de existir, la vida útil remanente, el valor al final de la vida útil de cada activo; identificar las inversiones realizadas en sus activos o la adquisición de activos; además, la valuación del activo permite determinar el monto de aseguramiento en los casos en que asegurar el activo, es necesario.
Dentro de las empresas existe un departamento encargado de gestionar los cambios en los activos, registrar la depreciación, identificar altas y bajas en los inventarios, y otros controles necesarios. Sin embargo, las Normas de Información Financiera recomiendan que la ejecución de estas actividades sea realizada por personal capacitado, experimentado y ajeno a la empresa, para que el ejercicio de valuación resulte imparcial y refleje el valor de los activos en las condiciones en que se encuentran.
Asimismo, menciona la importancia de contemplar las mejoras, obsolescencias, plusvalía, mantenimientos mayores, y todo aquello que pueda afectar el valor de los activos. Otra ventaja de tener personal ajeno para realizar el control del activo fijo permite identificar el registro contundente de los activos en la contabilidad y las bajas de los mismos.
El control de activo fijo y la valuación de los mismos son herramientas indispensables dentro de una transacción o adquisición de una entidad comercial, pues más allá de adquirir un negocio y los flujos que puede generar, se adquiere propiedad en activo fijo tangible e intangible, el reconocimiento y valuación del patrimonio adquirido son elementos fundamentales dentro de la asignación de precios de transferencia entre empresas.
Es importante medir y valorar la importancia de los activos e igual de importante es elegir al grupo de expertos que se ve a sí mismo como parte de la solución a una necesidad, y entender esas necesidades genera alianzas.
El momento coyuntural actual y la globalización nos invitan a tomar decisiones eficientes que permitan procesos de planeación, organización, dirección y control ágiles y confiables. Tasvalúo se suma a esa necesidad y ofrece soluciones a nuestros partners, para una toma de decisión informada y certera. El conocimiento sobre la situación real de las condiciones físicas, productivas y de mercado de los bienes, es lo que identifica a Tasvalúo como la unidad de valuación más grande de México. Apoyar a nuestros clientes para encontrar las soluciones a sus necesidades nos permite generar una sinergia con ellos y un vínculo de confianza al contar con nuestro apoyo en cada una de las soluciones en que participamos.
Una empresa exitosa reconoce la gestión de los activos, como un proceso importante del funcionamiento y eficiencia en su actividad, pues una buena gestión de los activos permite mantener una empresa saludable financieramente.
*Alberto Ramos Galindo, Director del área de valuación y control de activo fijo de Tasvalúo
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Redacción Centro Urbano
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